El dibujo “Bajo” intriga desde el título y casi obliga a ir deshojando la imagen, examinando y comparando cada elemento con la palabra bajo.
Es una obra alegre y divertida, una de las más
abstractas del repertorio de Iñaki.
La silueta sin brazos representa sin duda a
una mujer, evocando las esculturas clásicas de la Venus de Milo. Su cuerpo
sugiere movimiento, y la expresión del rostro transmite gozo. Todo ello, junto
con las líneas que llenan el espacio alrededor de la figura, nos remite a la
música y a las cuerdas.
¿Y dónde está el bajo? Lo que a primera vista
parece la prolongación del cuerpo en forma de brazo, amarillo y brillante, bien
podría representar un saxofón…
¿Pero y si, en realidad, sí es un bajo lo que
se representa? De pronto, lo que envuelve el cuello de la mujer y desciende
desde su boca hasta la cintura comienza a parecerse a cuerdas; lo que antes era
un saxofón, se transforma en el mástil y el clavijero del bajo; y lo que
parecía una hebilla, se revela como el cuerpo del instrumento.
Una transformación tan inesperada como
reveladora.
Natalia.
Comentarios
Publicar un comentario