Acampada
" Miro por la ventana y, sin motivo aparente, un recuerdo se cuela en mi mente: una acampada. Quizás porque los recuerdos, a veces, tienen más intensidad que la realidad misma. Era mi primera acampada, organizada por mi padre junto a su amigo Paco. Desde el inicio, las cosas no salieron como esperábamos. De camino, Paco se dio cuenta de que había olvidado la linterna, lo que nos obligó a desviarnos para comprar una. Más tarde, a medio camino, una rueda reventó, y tuvimos que detenernos para cambiarla. Sorprendentemente, mi padre estaba de muy buen humor. Decía que las pequeñas complicaciones eran parte de la aventura que nos esperaba. Cuando me preguntó si quería ayudarle a cambiar la rueda, acepté sin dudarlo. Mientras trabajábamos, me enseñó cómo se llamaban las herramientas y qué debía revisarse antes de dar el trabajo por terminado. Llegamos al campamento más tarde de lo previsto y tuvimos que apresurarnos para recoger leña y montar la tienda de campaña antes de que ano...